Con un par de varillas le hicimos la estructura, camiseta inter las unimos con hilo de pescar y Claire (la mamá de la familia Australiana con la que estamos pasando esta cuarentena en Australia) nos la remató con su máquina de coser. Tomamos cerveza Águila en cantidades industriales y bailamos lo que pudimos con movimientos robóticos estilo gringo, si los comparamos con los suaves contoneos de los locales. Los escasos restos arqueológicos que quedan en la isla cuentan cómo vivían estos indígenas 7000 años atrás.