Los diseños que lanzó Adidas para el siguiente mundial (los de los rombos) no alegraron tanto la vista. El fenómeno fue extendiéndose de tal manera que la revista Time bautizó el año 1955 como el año del rosa y dedicó un amplio e inolvidable reportaje al asunto, que sale a colación siempre que alguien quiere hacer un tema sobre las camisas rosas. En un diseño muy ochentero, Adidas aprovechó sus tres franjas para dibujar la bandera alemana sobre el pecho y los hombros de la camiseta.