Al respecto, véase la controversia por el decanato. La transición de 1913 y la cuestión del decanato. Los Atléticos gracias al gol de Ratón Ayala ganaron el partido de vuelta en casa frente al Independiente de Buenos Aires y se convirtieron en el Club campeón del Mundo. Luego de empatar 1:1 tanto en la ida como en la vuelta definió la clasificación en un tercer partido jugado en Florencia, Italia, que terminó por 3:2 a favor del equipo yugoslavo en tiempo suplementario.